Por ley, todas aquellas empresas que superen los 50 empleados deben tener, al menos, un 2% de su plantilla a personas con discapacidad. Los contratos a personas de este colectivo han aumentado ligeramente en los últimos años.
Nuestras capacidades diferentes no deben convertirse en un obstáculo para acceder a un puesto de trabajo. Por eso, si estás buscando trabajo y tienes que pasar por procesos de selección, apúntate estos consejos:
Crea tu propio DAFO. Si quieres que los entrevistadores te conozcan, antes tendrás que conocerte bien a ti mismo. Apunta tus fortalezas y oportunidades y trata de mostrarlas en la entrevista. Busca también tus amenazas y debilidades y piensa en cómo corregirlas.
Lleva una mentalidad positiva. No pierdas la confianza en ti mismo, todos tenemos debilidades. No pienses en lo que no puedes hacer, piensa en todo lo que tienes que ofrecer. No te sientas inferior al resto porque no lo eres, eres distinto y hay miles de cosas que puedes hacer. Si tienes seguridad en ti mismo los entrevistadores también verán todo tu potencial.
Estudia tus derechos y los beneficios que puede aportar a la empresa contratarte. Por desgracia, la sociedad aún desconoce muchos de estos aspectos. Explícales todas las ventajas de las que podéis beneficiaros, pues en muchas ocasiones se cae en el error de pensar que contratar a alguien con discapacidad supondrá costes extra para la empresa.
Investiga sobre la empresa. Muestra interés en ellos. Busca qué hacen, cuáles son las funciones de tu puesto, qué política social tienen, la accesibilidad en el puesto de trabajo…
Sé puntual y viste adecuadamente. Demuestra tu educación llegando con tiempo. Saluda a todos tus entrevistadores dándoles la mano con seguridad. Mantén un aspecto cuidado.
Demuestra todas tus aptitudes. Muéstrate con predisposición a aprender y mejorar en la empresa. Que vean que tu discapacidad no es ninguna barrera para aporta valor a la empresa.
Prepara una serie de preguntas para hacerle al entrevistador. Piensa todas las dudas que deban ser resultas sobre el puesto y las condiciones. Preguntar también demuestra interés y, además, al final de algunas entrevistas te piden que les preguntes algo. ¡Llévalo bien preparado y no te pillará por sorpresa!
Y ahora que ya tienes estos consejos, adelante. Demuestra lo que vales. Demuestra que estás muy capacitado para realizar ese puesto de trabajo al que aspiras.
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